Chetumal, 11 de mayo
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Ante la falta de regulación en materia sanitaria que tienen centenares de comercios informales de Chetumal, aumenta drásticamente el riesgo de contraer enfermedades relacionadas con el consumo de alimentos en la vía pública, acusó el regidor de Othón P. Blanco, Federico Hernández, al considerar que el ambulantaje ha incrementado en un 300%, tan sólo en un año.
“Con los efectos de la crisis económica han aumentado considerablemente los puestos ambulantes que venden alimentos y bebidas, pero sin cumplir con las normas sanitarias, por eso vemos necesario que intervengan las autoridades de salud para evitar riesgos en los consumidores, más ahora que estamos en temporada alta de calor”, dijo el concejal.
Actualmente, la ciudad de Chetumal permanece invadida de vendedores ambulantes, quienes aprovechan el descuido de las autoridades competentes, desde la zona centro, parques públicos, balnearios, incluso a las afueras de oficinas gubernamentales son fáciles de observar, añadió Federico Hernández.
Agregó que al tratarse de un tema delicado, el ambulantaje debe ser regulado por el Ayuntamiento, es decir, por medio de la Coordinación de Salud, para cerciorar que todos estos vendedores cumplan con las reglas sanitarias, pues, la mayoría han sido vistos que funcionan de manera insalubre.
Puso de ejemplo a cuatros puestos ambulantes que hay en los alrededores del Mercado Ignacio Altamirano, el cual vende empanadas a tres pesos ya que son preparadas sin la higiene correspondiente y cuyo propietario es de una marisquería de prestigio en Chetumal de nombre Ernesto.
