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Entre Pedro Flota y Juan Carrillo saldría el sucesor de Chanito

Chetumal, 3 de noviembre

En pocas semanas el fiel de la balanza política se inclinará para definir quién quedará al frente de la Gran Comisión, ahora en manos de José Luis Toledo Medina.  Según los cálculos, la definición llegará a comienzos de año, cuando comiencen a extenderse las licencias para algunos diputados que entrarán al ruedo electoral en busca de la diputación federal de 2015.

La Gran Comisión (donde antes han estado Eduardo Espinosa Abuxapqui, hoy alcalde de Othón P. Blanco; Luis González Flores y Manuel Valencia Cardín), se trata de nada menos que el manejo de la agenda legislativa y la máxima representación de uno de los tres poderes del estado; por demás está decir que se trata de una de las plataformas políticas más importantes por su incumbencia en los asuntos políticos, sociales y económicos. Estar al frente de este espacio conlleva una “especial” cintura para el diálogo, con grandes dotes para la negociación y así lograr la paz política al interior del Congreso y su proyección estatal.

Hacia el interior del PRI se habla de dos nominados en sólida posición de asumir dicha función. Uno representa una generación con más experiencia, y el otro, la juventud que forma parte del sello de esta legislatura. Se trata de Pedro Flota Alcocer y Juan Carrillo Soberanis, cada quien con roles diferentes dentro del partido y con antecedentes suficientes para asumir la presidencia.

Flota ha logrado estabilidad hacia el interior del PRI como su actual presidente y ha demostrado su institucionalidad a prueba de balas. El joven diputado, en tanto, es uno de los principales responsables de programa “Reciclando Basura por Alimentos”, uno de los íconos de la administración Borgista. En política cada minuto cuenta y seguramente la coyuntura tendrá que ver con la elección; aunque en el caso de Flota, lo pondría a tiro de piedra de ser candidato a la presidencia municipal de Othón P. Blanco, para lo cual ha venido trabajando con disciplina desde hace años. En el caso de Carrillo Soberanis, ascender a un espacio entre las primeras líneas de mando en la política quintanarroense y consolidarse como uno de los fuertes recambios de una generación de políticos quintanarroenses.

Fuente: Quequi

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