Principales

Patada a discapacitados

Golpe de Mazo
Novedades Chetumal

.

Digno de desprecio el rostro descarnado del ex alcalde de Tulum y director de la Comisión para la Juventud y el Deporte (Cojudeq), Martín Cobos Villalobos, quien discrimina a deportistas paralímpicos al considerarlos indignos de recibir apoyo  no precisamente de su bolsillo, sino de una institución gubernamental cuya tarea prioritaria consiste en apoyar a tales deportistas heroicos.

Martín Cobos –cuyo paso por la Cojudeq no alcanza siquiera notas mediocres, ya que permanece en el fondo de la tabla– no hizo este comentario en la soledad de su recámara, sino en plena reunión con entrenadores, a quienes advirtió que no iba a invertir un centavo en estos deportistas paralímpicos, quienes no merecían siquiera el pétalo de su atención.

Hablamos de deportistas de alto rendimientos de Playa del Carmen, entre ellos arqueros que han puesto en alto a Quintana Roo y que recibieron una patada del titular de la Cojudeq, quien ha mostrado un rostro que denigra al servicio público.

atletas en sillas de ruedasOfende la insensibilidad de este pequeño burócrata que ignora la orientación de las prioridades gubernamentales a nivel federal, estatal y municipal. Ofende ante todo porque Martín Cobos fue maestro de educación cívica, aunque analizando su comportamiento más bien lo fue de educación cínica.

Lo cierto es que el ex alcalde de Tulum se manifestó como un declarado enemigo de los deportistas paralímpicos, aunque más bien está peleado a muerte con la juventud y el deporte, dando por hecho que su nombramiento es una recompensa ajena a la rendición de cuentas.

 A todo esto, llegado el momento la somnolienta Comisión del Deporte en el Congreso del Estado –presidida por el invisible diputado del Verde Ecologista, Pablo Fernández Lemmen Meyer– tendrá que hacer un balance del desempeño de Martín Cobos Villalobos, quien debe dar un viraje de 180 grados en su concepto de amor al prójimo.

Unidad deportiva cerrada los domingos

A cientos de chetumaleños nos parece absurdo que la Unidad Deportiva del Instituto Tecnológico de Chetumal (ITCH) –donde el gobierno del estado hizo una inversión millonaria– cierre sus puertas los domingos a todos, cuando precisamente las familias tienen más tiempo para correr y trotar en ese espacio ubicado en las avenidas de los Insurgentes y del Magisterio.

La campechana Estela Rivera López, directora del ITCH, dio esta orden que no tiene la menor justificación, ya que va contra toda lógica. Prohibido el paso para todos, advierte el solitario guardián.

Estas instalaciones están abandonadas por completo, ya que la pista de atletismo se encuentra en pésimo estado y la maleza predomina para beneplácito de miles de mosquitos que son una calamidad.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba