ONCE PASOS
Javier Chávez Ataxca
La coalición maya caribeña encabezada por Morena está decidida a quedarse con todas las canicas en esta gran guerra electoral cuyo plato fuerte es el trono del Presidente Andrés Manuel, pero hay flancos calientes que generan serias dudas en su cuartel general que diseña el “carro completo” estilo viejo PRI.
Anoche habría logrado la rendición incondicional del “Chak Meex” José Esquivel Vargas, exalcalde del municipio maya de Felipe Carrillo Puerto que estaba a punto de ser candidato retador del PRD, hasta su captura y traslado al Cereso de Chetumal por presunto desvío del presupuesto.
En la soledad de la prisión ubicada frente al aeropuerto capitalino, con la soga al cuello el exalcalde habría decidido bajarse del caballo para concentrarse en su defensa, según justificó en una carta que envió al Comité Ejecutivo Nacional y al Instituto Electoral de Quintana Roo, y que fue difundida ayer por la tarde.
Pero esta carta no es reconocida por la dirigencia estatal del PRD, porque uno de sus líderes así reaccionó: “Al parecer hackearon la página, porque “Chak Meex” está en audiencia desde las cinco de la tarde y termina como a las dos o tres de la mañana. La publicación no es autorizada, pero forma parte de la presión normal”.
El PRD decidió sostenerlo como candidato aún en prisión, dejando como suplente a su hija Michelle Esquivel Esquivel, pero la aparente rendición incondicional del “Chak Meex” incluiría la desactivación de esta candidatura que sería muy peligrosa para la alcaldesa morenista Mary Hernández Solís, a quien dejarán solitaria en la contienda para evitarle emociones fuertes.
El expresidente municipal de Felipe Carrillo Puerto habría mostrado su banderita blanca, acorralado por expedientes de corrupción que no habían sido revisados hasta que se le ocurrió ir de nuevo al combate electoral, entusiasmado por ser gladiador del debilitado PRD que abandonó su coalición con panistas y priistas.
Pero la fugaz calentura del “Chak Meex” dio bríos a un perredismo involucrado en el no descenso y que ahora quiere ser protagonista del calibre de Movimiento Ciudadano, pero el partido del “sol azteca” tiene una militancia microscópica, al igual que su presupuesto.
En Quintana Roo se disputan once presidencias municipales, 15 diputaciones de mayoría, cuatro diputaciones federales y dos senadurías en paquete, a las que se añade un tercer escaño para el segundo lugar.
En suma, son todos los cargos de elección a nivel local y federal, por lo que estamos ante la elección más importante de todos los tiempos por la cantidad y calidad de lo que será disputado por dos coaliciones –una encabezada por Morena y Verde Ecologista y otra formada por PAN y PRI– y dos partidos: Movimiento Ciudadano y PRD.
Esta es la primera elección para la lopezobradorista Mara Lezama en la gubernatura, y la exalcaldesa de Cancún está decidida a entregar números satisfactorios a la candidata presidencial Claudia Sheinbaum, pero los flancos calientes están en los municipios de Solidaridad (Playa del Carmen), Cozumel y Tulum.
En Playa del Carmen su alcaldesa Lili Campos Miranda es la única de oposición que queda en el tablero y compite muy en serio, decidida a ser la primera que logre la reelección en esta poderosa silla de la Riviera Maya.