Alerta Roja
Javier Chávez Ataxca
El Congreso quintanarroense manejado por la 4T cierra los ojos ante los asesinatos de candidatos en varios puntos del país y la violencia que desangra a nuestro estado, pero su piel es de pollitos berrinchudos cuando tocan la imagen de sus diputados en redes sociales. Entonces se escandalizan y empuñan una reforma constitucional con la que pretenden colocarnos a los periodistas un bozal para perros.
Esta iniciativa morenista fue defendida por la diputada cancunense Susana Hurtado Vallejo –de la Cuatroté y con pasado priista y borgista–, quien se ofende porque algunos medios hostiles los agreden en redes sociales al publicar una fotografía “que no es la mejor en tu imagen” y sin contar con su autorización, afectando la intimidad.
Susana Hurtado aseguró que estos medios “violentan tu integridad, tu intimidad como ser humano”, por lo que aplaudió la reforma constitucional en curso.
Los diputados de la 4T “ven la tempestad y no se arrodillan”, porque hay decenas de asesinatos de candidatos en medio México y las muertes y desapariciones son un drama colectivo en Quintana Roo.
Susana Hurtado quizá recuerde la desaparición de la niña Fernanda Cayetana Canul Blanco, vista por última vez el 21 de julio de 2022 en la zona continental de Isla Mujeres. El caso lo mantiene en el olvido la Fiscalía General de Quintana Roo tan mal dirigida por el chiapaneco Raciel López Salazar.
Como esta pequeña de 13 años han desaparecido otros quintanarroenses, pero Susana Hurtado y los negligentes diputados de la 4T se escandalizan porque les publican fotos sin su mejor ángulo, ignorando la esencia del trabajo periodístico que no está para cumplir caprichos al sacar a nuestras diputadas locales de la 4T bien maquilladas y hasta con el retoque del Photoshop.
Nuestra ley para la protección de periodistas la tienen sepultada en el Congreso local desde que la enterró el gobernador Carlos Joaquín, con la diligente complicidad de panistas y perredistas. Esta ley sí es prioritaria, Doña Susana Hurtado.