Alerta Roja

Estefanía Mercado respalda en persona a Roberto González, víctima de Lord Cobarde

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Javier Chávez Ataxca

La futura presidenta municipal de Solidaridad, Estefanía Mercado Asencio, visitó y dio todo su respaldo al señor Roberto González, atacado físicamente en un fraccionamiento de Playa del Carmen por una pareja que lo dejó cuadrapléjico, en enero de 2017.

Desde entonces la impartición de justicia ha sido lenta y hasta complaciente, porque sus tenazas no han alcanzado al hombre conocido como “Lord Cobarde” y a su esposa. El Lord ha conseguido amparo tras amparo y tiene un arraigo que le impide abandonar Quintana Roo, pero se mueve libremente en Playa del Carmen.

Así escribió ayer Estefanía Mercado en su red social:

“Dándole seguimiento al caso de nuestro querido amigo Rob, hoy pasamos a visitarlo. Mañana enfrenta una audiencia crucial en un proceso que ha generado indignación en toda la ciudadanía. No lo dejaremos solo en este momento tan importante; estaremos atentos y acompañándolo en cada paso, hasta que se haga justicia”.

“Rob, estamos contigo, hoy y siempre”, rubricó la futura alcaldesa morenista.

El dos de marzo pasado Novedades Quintana Roo publicó una entrevista a Roberto, cuando por fin recuperó el habla. Así detalló la golpiza al reportero Octavio Martínez:

“Él me dijo ´ahora sí desgraciado, te llegó la hora: te voy a matar´. En eso llegó su esposa y entre los dos me golpearon. Uno de los golpes me pegó en el cuello, a la altura de la cervical, y me rompió las cervicales produciéndose una lesión medular; esa lesión cambió mi vida”.

Lo que detonó la agresión fue un reclamo de Roberto, harto de que el perro de la pareja hiciera popó tiro por viaje en el frente de la casa, en el fraccionamiento La Joya. La reacción del matrimonio fue excesiva, con garra criminal. 

Aquí llama la atención la mano amiga para Lord Cobarde, porque –cito a Novedades– el juez del sistema penal acusatorio reclasificó el delito, para cambiarlo de homicidio en grado de tentativa a lesiones. Pero hay de lesiones a lesiones, como comprendería el señor juez si la víctima fuera su hija o nieta.

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