Alerta Roja
Javier Chávez Ataxca
Mientras las figuras genuinas de Morena a duras penas se instalan en cargos de elección popular, el mandado se lo siguen comiendo mujeres y hombres procedentes del PRI, PAN y Verde Ecologista –este con la mayor tajada–, como ocurrió en el reciente combate que dejó a la Cuarta Transformación como dueña y señora de todos los dominios maya caribeños: once presidencias municipales, 15 diputaciones locales, cuatro diputaciones federales y las dos senadurías en paquete.
La rentabilidad electoral explica en gran parte el avance de los “importados” que juran amor eterno a la 4T, desplazando a quienes han hecho talacha bajo sol y lluvia. Es válido ese beneficio para Morena si hablamos de la bien vista Atenea Gómez Ricalde, quien en 2021 ganó la alcaldía de Isla Mujeres con los colores del PAN y la indispensable autorización del gobernador Carlos Joaquín González.
Pero no aplica con el “Chepe” José Alfredo Contreras Méndez, un violento macho ex priista que representa todo lo que combate el partido del Presidente Andrés Manuel en el cacareado discurso, pero que logró la reelección en Bacalar disfrazado de guinda, pisoteando a morenistas limpios y disciplinados como Rivelino Valdivia Villaseca.
En nuestra capital ganó por milímetros la genuina alcaldesa morenista Yensunni Martínez Hernández, superada en Chetumal por la naranja Lidia Rojas Fabro.
En Carrillo Puerto se vieron forzados a enviar a prisión domiciliaria al “Chak Meex” José Esquivel Vargas para hacer ganar a su alcaldesa Mary Hernández –también morenista de cepa–, pero aún así la hizo sudar frío la profesora María Luisa Poot Ek, lanzada sobre la marcha como candidata del PRD.
En Tulum ganó Diego Castañón Trejo, quien del Verde saltó a Morena. En Solidaridad hicieron ganar a la exverde Estefanía Mercado Asencio, también sumada a Morena por conveniencia política. Lo mismo ocurrió con la alcaldesa cancunense Ana Patricia Peralta de la Peña, quien procedente del Verde fue bautizada en las valiosas aguas del partido guinda.
Son botones de muestra –tengan presentes Cozumel, Puerto Morelos, José María y Lázaro Cárdenas–, porque la médula de esta columna es la descuidada formación y consolidación de figuras de Morena, un partido que está dejando que le coman el mandado los asimilados del PRI, PAN y Verde Ecologista.
Camino al área de terapia intensiva, el PRI en camilla puede murmurarle a Morena que ellos cuando ganaron todo ocupaban las posiciones políticas con sus propias figuras. Era todo para los tricolores cuya arrogancia explotó en el mandato del joven cozumeleño Roberto Borge Angulo, culpable de su humillante expulsión de Palacio de Gobierno. Pero aquí Morena es un arrimado en la residencia escriturada a su nombre.