Caza de campaña
Javier Chávez Ataxca
La exalcaldesa chetumaleña Cora Amalia Castilla Madrid concentra todas las cualidades que piden los ciudadanos responsables a la hora de elegir en un menú de candidatos donde predomina la improvisación, con fuerte carga oportunista de quienes andan cambiando de casaca partidista con rapidez felina.
Pero no es este el caso de la candidata a diputada federal por el segundo distrito que compite con los colores del PRI –su partido de toda la vida–, PAN y PRD, desarrollando su campaña en Othón P. Blanco, Bacalar, Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos y Tulum, poderoso municipio añadido en esta elección.
El elector que conoce el valor de su voto y no lo vende a cambio de un apoyito sabe que Cora Amalia es la política más experimentada y con la mejor de las trayectorias en el servicio público y la política, con dos cualidades irrebatibles que le abren paso automático en cualquier partido.
Aquí resalto la primera de sus cualidades: a diferencia de muchos ha permanecido fiel al PRI, un partido abandonado por decenas de políticos que en tiempos recientes saltaron a Morena, Verde Ecologista y Movimiento Ciudadano. Pero en Cora Amalia vemos una convicción admirable en esta prolongada temporada de saltarines que han abandonado al Pritanic.
Y la segunda cualidad es su historial sobresaliente como la mejor alcaldesa capitalina de todos los tiempos –incluyendo a casi todos los caballeros–, porque a ella no se le pueden reprochar actos de corrupción o frivolidades ofensivas.
Muchos recordarán su etapa como alcaldesa –de 2005 a 2008–, cuando negoció con una filial de la empresa ADO para instalar un transporte urbano de primera que tanto se extraña desde hace 12 años, sin que nuestras autoridades municipales hayan movido un dedo para devolvernos este servicio tan necesario para miles de chetumaleños.
Cora Amalia Castilla Madrid fue maltratada por el gobernador Roberto Borge Angulo, quien ordenó que el partido la reprobara cuando quiso ser candidata a diputada federal, saltando de la diputación local. De esos excesos que provocaron la caída prematura del Tricolor, porque el arrogante Beto Borge se convirtió en el principal propagandista de Carlos Joaquín González, quien en 2016 sacó al PRI de Palacio de Gobierno.
Esta perseguida candidatura como diputada federal la obtuvo Cora Amalia en 2018, pero fue doblegada por la avalancha provocada por la candidatura presidencial de Andrés Manuel López Obrador, quien hizo ganar a la chetumaleña Patricia Palma Olvera, desaparecida de escena.
