Javier Chávez Ataxca
CAFÉ DE ALTURA
Exponentes de aquel PRI que dominó el tablero de la política hasta 2016, los exgobernadores cozumeleños Miguel Borge Martín y Félix González Canto acompañaron ayer a la exalcaldesa chetumaleña Cora Amalia Castilla Madrid en su toma de posesión relampagueante, para relevar al capitalino Pedro Flota Alcocer en la dirigencia estatal del PRI.
Puede mucho su amistad con Cora Amalia y los une su convicción partidista, rara ave en estos tiempos de cínicos que a la primera han abandonado al Pritanic para declarar su amor a Morena, Verde Ecologista y Movimiento Ciudadano.
Uno de los ejemplos a la mano lo tenemos en “El Chepe” José Alfredo Contreras Méndez que ya se había apartado del PRI, pero por órdenes del gobernador Carlos Joaquín González se registró como su candidato a la presidencia municipal de Bacalar, para ser respaldado por la coalición que derrotó a la 4T en 2021.
Traidores con daga como “Chepe” abundan en política y bien lo sabe Atenea Gómez Ricalde, quien como panista ganó la presidencia municipal de Isla Mujeres y saltó a Morena para asegurar la reelección en la pasada competencia electoral.
Por ello es de reconocerse que los exgobernadores Miguel Borge y Félix González sigan fieles a su partido, al igual que Cora Amalia y Pedro Flota Alcocer.
Su mérito es mayor porque ya dejaron de estar conectados con Palacio de Gobierno y dejaron de disfrutar el abundante financiamiento bajo el agua. Ahora si acaso les llegan 50 bolillos, aceite Patrona y cinco kilos de frijoles a la semana. Como “La Bartola” sufren estos priistas para pagar la luz y el agua potable.
En estas circunstancias tan adversas veremos en acción a Cora Amalia Castilla Madrid, una mujer que no se achica ante desafíos de esta naturaleza y que a diferencia de otros jamás se disfrazará de morenista, porque no todos son oportunistas en política.
