Desde los Once Pasos
Javier Chávez Ataxca
Si la oposición no interrumpe sus prolongadas vacaciones, el matrimonio por conveniencia formado por Morena y Verde –con el PT como paje de boda – cosechará otro “carro completo” en la renovación de los 15 distritos electorales.
Y para este pronóstico no hay bola de cristal de Rogelio Rivero o revelación del brujo de Catemaco, ya que el partido del Presidente Andrés Manuel López Obrador garantiza triunfos en racimo, independientemente de la calidad de sus candidatos.
La única duda se concentra en la definición de candidaturas para llegar al multimillonario Congreso donde predomina la incompetencia, con muy pobres resultados en la agenda legislativa porque a estas alturas no pueden elegir a un titular de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, o parir de nuevo nuestra Ley para la protección de periodistas y defensores de derechos humanos, insensatamente incinerada por el gobernador Carlos Joaquín antes de que comenzaran a matar periodistas en el Caribe mexicano.
Por ello es saludable que los diputados de Morena no tengan permiso para ir por la reelección, con excepción de la experimentada cancunense Mildred Ávila Vera que en la pasada elección apaleó a la exmorenista Reyna Durán Ovando, candidata del PAN en el distrito cinco.
En los hechos en nuestro distrito 15 del sur no tenemos diputado, aunque cobra como tal el incompetente Omar Rodríguez Martínez, quien también pasó de noche como regidor capitalino en el catastrófico desgobierno del alcalde relevista Otoniel Segovia Martínez, cuyo mandato de pesadilla fue posible por la muerte de Don Hernán Pastrana Pastrana apenas iniciando su período como alcalde de Morena.
Es positivo que Morena y Verde sean exigidos en varios distritos, pero la oposición no se mete en el terreno de juego y deja pasar todas las banderas de campaña, resignada a pescar los premios de consolación de las plurinominales. Y no reacciona Movimiento Ciudadano y tampoco la coalición retadora formada por PAN, PRI y PRD, una suma de desnutridos desmoralizados porque saben que no pueden ganarle a la cuatroté.
Morenos y verdes están a años luz de sus competidores, por lo que tienen garantizado su “carro completo” que les dará el control absoluto del Poder Legislativo multimillonario, pero tan pobre en resultados.
Y no hay excusa que valga para ellos, porque cada diputado recibe 25 mil pesos para sus inservibles casas de gestión, incluyendo 25 mil en vales de gasolina que utilizan para fines personales, como los 30 mil pesos que reciben para una labor de gestoría que jamás realizan, concentrados en el disfrute de sus confortables posiciones políticas.