Déjame te Cuento
Ángel Solís
En pleno siglo XXI, cuando la totalidad de sus habitantes usan ropa y más del 95 por ciento de su población sabe leer y escribir, en Tulum se vive un intento de conquista de hombres blancos y barbudos —esta vez del centro del país— que ahora pretenden someter y arrebatarle sus riquezas a los descendientes de los mayas, por medio de la imposición de un joven que más que político tiene cara de títere.
Y es que el pasado domingo la plana mayor del Partido Morena, como lo es el coordinador de los diputados federales, Ricardo Monreal Ávila y Marcelo Ebrard Casaubón, Secretario federal de Economía, así como el senador verdeecologista Manuel Velasco Coello (mano derecha de Jorge Emilio “El Niño Verde” González Martínez), estuvieron en Tulum no solo para respaldar sino para destapar a un desconocido Enrique Vázquez Navarro, originario del estado de Veracruz y desde ahora aspirante a la presidencia municipal tulumnense.
Sin el menor mérito para aspirar a ese cargo y sin experiencia laboral alguna, con solo estudios de bachillerato a sus 22 años de edad y un total desconocimiento de Quintana Roo y sobre todo del municipio que pretenden que gobierne, que para él solo es zona turística, porque desconoce que cuenta con poblaciones de zona maya y zona de transición, a “Kike” los ex priistas Monreal y Ebrard ya lo destaparon para la silla municipal de Tulum.

En esta descarada presentación que hicieron estos dinosaurios políticos del joven legislador federal a quien solo lo conocen en su casa, no se cuidaron las formas. Tal parece que la 4T pretende regresar a Quintana Roo a sus tiempos de Territorio, cuando desde el centro del país podrían enviar a cualquier persona para gobernar y enriquecerse a manos llenas.
Morena y su aliado Verde aprovechan que no existe mano dura en Quintana Roo y evidentemente también en Tulum, ya que en tiempos del exgobernador Mario Villanueva Madrid, con su frase “En mi estado mando yo”, el destape del pasado domingo nunca habría ocurrido y ni lo habrían intentado.
Y si Marciano Dzul Caamal viviera, el diputado federal Kike Vázquez estaría dando su informe en Xalapa (Veracruz), su tierra natal.
Desgraciadamente la diputada local Silvia Dzul Sánchez, la ex presidenta municipal tulumnense Romualda Dzul Caamal y la actual regidora Ileana Canul de Dzul, así como muchos denominados “marcianistas”, hoy callan como momias ante el atropello político que hacen estos viejos ex priistas, al intentar imponer como alcalde de Tulum a un jovencito veracruzano para mangonearlo a su antojo.
Quintana Roo estaría jugando con fuego de permitir la llegada de ese gris personaje, ya que Tulum puede ser solo el laboratorio de lo que vendrá de 2030 en adelante, ya que de darse esta candidatura los otros 10 municipios y hasta la gubernatura serían presa fácil para Morena y su principal aliado: el Partido Verde.
Personas ajenas a Quintana Roo ya están tomando decisiones en el estado, la mafia guinda pretende arrebatar el municipio de Tulum y próximamente quedarse con todo, al no existir quien lance un manotazo en la mesa y mucho menos liderazgos políticos que alcen la mano.
Y a todo esto: ¿Dónde están los marcianistas?






