Desde los Once Pasos
Javier Chávez Ataxca
Dos fotografías de estudio que puso en órbita al cumplir 36 abriles nos muestran a la alcaldesa chetumaleña morenista Yensunni Martínez Hernández con una imagen física muy diferente y prácticamente radical, novedad que atizó el avispero en las redes sociales porque son tiempos de calentura electoral ideales para el golpeteo inmisericorde.
La presidente municipal lopezobradorista ha dado un giro muy llamativo en su cuerpo y aquí entra la especulación y difusión de versiones sin confirmar sobre el uso de recursos públicos para delinear su figura con intervenciones quirúrgicas a las que recurren algunas damas para estar irreconocibles estéticamente, aumentando o moldeando pompa, busto, cintura, nariz, pómulos y más zonas del cuerpo, tema en el que no soy especialista y por ello puedo ser incorrecto.
En una fotografía de estudio hay recursos que aplica el mago de la imagen, de tal forma que uno puede lucir como Rodolfo Valentino o Brad Pitt con el juego de luces y sombras, y en la mujer interviene el maquillaje y la toma en ciertos ángulos.
Yensunni persigue la reelección y si es candidata puede irse de vacaciones en toda la campaña, porque Morena arrasa sin disparar una bala. Eso que llamamos oposición tan sólo adornará las boletas electorales, dando la engañosa apariencia de competencia democrática.
Coincidí con Yensunni antes de la invasión del Covid, cuando también acudía a un gimnasio cercano a la complicadísima terminal de autobuses de la avenida de los Insurgentes, cerca de la pizzería Little Caesars (factura en camino).
En mi caso, uno acude a estos centros de tortura física no sólo para tener una mejor figura, porque hay que quemar un chingo de calorías para que el cuerpo tenga niveles aceptables de triglicéridos y alimenta riesgos el cuerpo anclado en el sillón y en el auto.
Dos mujeres periodistas le entraron al tema y lanzaron opiniones sensatas: Lenny Prado y Joana Maldonado.
La chetumaleña Lenny Prado –figura sobresaliente del destruido Sistema Quintanarroense de Comunicación Social– lo dijo así:
“Se habla mucho de sororidad, de empoderarnos, de respeto, de igualdad y hoy aún se nos desliza ligerita la pluma para ofendernos entre nosotras. No sé se la señora se sometió a cirugías, ni si cambió su alimentación y hace ejercicio cotidianamente…”
“Hombres, no les compete opinar del físico de nadie, del trabajo hecho o no, ahí es tema aparte. Mujeres, ¿de verdad nos respetamos? ¿Nos gustaría leer cuestionamientos sobre nuestra apariencia física en las redes? ¿Qué nuestra familia tuviera acceso a esa basura? A mí no”.
La excelente periodista Joana Maldonado –de Grupo Turquesa en Cancún– lo dijo así:
“Hay un montón de temas que criticar del gobierno de OPB, de cómo se encuentra la capital, y los medios decidieron hacer una nota mediocre sobre el aspecto físico de la alcaldesa nivel TVNotas porque no aportan pruebas de que exista un desvío de recursos públicos para los fines estéticos, que si existieran sería una gran nota. Pero no…”