Desde los Once Pasos
Javier Chávez Ataxca
Villano favorito de muchos quintanarroenses y sobre todo de los chetumaleños, el exgobernador priista cozumeleño Roberto Borge Angulo avanza hacia la prisión domiciliaria, noticia que recibe en temporada navideña desde el Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial del estado de Morelos, donde permanece desde el cinco de enero de 2018.
Y si bien un Juez Federal le concedió la prisión domiciliaria por lavado de dinero, seguirá en la helada mazmorra por los cargos de delincuencia organizada y peculado. Pero para su proceso es una noticia alentadora porque asciende hacia la libertad condicionada, ya que podrá liberarse de su calabozo infernal para disfrutar el calor hogareño en Cozumel.
Roberto Borge es el último gobernador de la era del PRI, cortada de tajo en 2016 por Carlos Joaquín González, a quien Beto combatió con rabia cuando competía por la candidatura. Pero el impulsivo gobernador logró el efecto contrario porque convirtió en víctima al hermano del exgobernador Pedro Joaquín Coldwell que fue candidato externo del PRD y del PAN.
El chetumaleño elevó a los altares a Carlos Joaquín y lo llevó en hombros a Palacio de Gobierno, castigando la soberbia de Beto Borge con sus vallas que alimentaron el coraje y desprecio de los capitalinos, con trabajadores del magisterio en primera fila.
La pesadilla se hizo realidad para Beto Borge al conocer los datos irreversibles que daban la victoria a Carlos Joaquín, aquel cinco de junio de 2016. El último gobernador del PRI sabía que se avecinaban días venenosos porque Carlos Joaquín llegaba con sed de revancha.
El cinco de junio de 2017 Beto Borge fue detenido en Panamá, cuando estaba a punto de tomar el vuelo a París. Este 29 de diciembre cumplirá 44 años, una edad en plenitud para nuestros políticos. Pero el exgobernador cozumeleño estaba muy inmaduro para la gubernatura que le entregó su amigo cozumeleño Félix González Canto.