Desde los Once Pasos
Javier Chávez Ataxca
En 2021 Morena trató con la punta del pie a los votantes del distrito electoral federal del sur y zona maya, con cabecera en Chetumal, la capital. Atreverse a postular a la cancunense Anahí González Hernández como candidata a diputada federal fue una cachetada para esta región que identifica a sus políticos, aunque a menudo sea defraudada por ellos.
La jugada fue exitosa para el partido del Presidente Andrés Manuel López Obrador, cuya poderosa figura logró que Anahí aplastara a los tres chetumaleños que la enfrentaron: José Alberto Alonso Ovando, Víctor Manuel Zapata Vales y Carlos Mario Villanueva Tenorio, hijo del magnético exgobernador Mario Villanueva.
El segundo distrito incluyó en esa elección a los municipios de Othón P. Blanco, Bacalar, Felipe Carrillo Puerto y José María Morelos. Ahora ha sido añadido Tulum, cuyo alcalde Marciano Dzul Caamal era candidato natural, pero fue arrebatado por la muerte y dejó un vacío político que intentará llenar su hija Silvia Dzul Sánchez, diputada local de Morena. O quizá sea lanzado como candidato a diputado federal el alcalde verde relevista de Tulum, Diego Castañón Trejo.
En los hechos, la diputación federal del segundo distrito pasó a poder de Cancún, donde Anahí González tiene cerebro y corazón de tiempo completo. Pero en 2024 esta diputación tiene que retornar a casa, ya que podemos dar por hecho que Anahí no será lanzada a la reelección, aunque puede conservar su curul sin despeinarse si es de nuevo postulada por Morena, Verde Ecologista y PT.
Llegado el momento de la designación de candidatos, la gobernadora Mara Lezama tendrá que abrir paso a una mujer o un hombre de casa, sea de Chetumal, Bacalar, la zona maya o Tulum. Lo vital es devolverle la representación política a una figura de la amplia región, aunque la musculatura de la marca Morena le permita lanzar como candidato a alguien de Cozumel o Isla Mujeres.
Pero también los partidos que enfrentan a Morena tienen que bajar de la cama, porque PRI, PAN y Movimiento Ciudadano han sido excesivamente tibios y no lanzan señales contundentes de que están o estarán en pie de lucha. Lucen como sonámbulos en plena madrugada.
Un diputado federal genuino del sur, zona maya y Tulum será opción automática para la gubernatura en 2027, aunque el mayor poder político se concentre en Cancún y Playa del Carmen, sillas municipales que serán decisivas para la gran guerra por el trono de la calle 22 de Enero.