Golpe de Mazo
Novedades Chetumal
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En grave peligro de extinción se encuentra el Centro Regional de Educación Normal (CREN) “Javier Rojo Gómez” por la evidente falta de interés de los jóvenes en estudiar para maestros, lo que ha impactado de lleno en la matrícula de esta institución sureña que está recibiendo solicitudes de inscripción a cuenta gotas.
La situación es crítica para la antes repleta Normal de Bacalar, tanto que incluso el titular de Educación, José Alberto Alonso Ovando, declaró que la matrícula de esta escuela formadora de docentes se desplomó en un 50 por ciento en comparación con 2014, cifra que según información interna de la institución es bastante optimista.
Porque la disminución matricular ha estado en picada constante en los últimos cuatro años, fenómeno que se observa a simple vista en las generaciones de estudiantes que cursan sus estudios profesionales en este centro educativo, ya que mientras que la generación de octavo semestre cuenta con seis grupos con un promedio de 35 alumnos cada uno, la generación más joven, de segundo semestre, apenas logró llenar tres grupos de alrededor de 30 alumnos.
Pero el panorama para el siguiente ciclo escolar es desolador. La información que ha trascendido es que, aún con todas las convocatorias lanzadas por el CREN de Bacalar y la reciente apertura de la licenciatura en Educación Física, el total de alumnos que solicitan un cupo no llega ni siquiera a las tres decenas.
La debacle normalista era previsible, dados los pésimos resultados que obtuvieron sus egresados en el examen de ingreso al Servicio Profesional Docente aplicado el año pasado, donde cerca del 70 por ciento resultó “no idóneo”.
Y mientras la Normal de Bacalar permanece secuestrada por un grupúsculo de familias que han impuesto como catedráticos a sus hijos, a pesar de que muchos no tienen ni la preparación ni la experiencia docente necesaria para formar a los nuevos maestros, la calidad educativa de la longeva institución ha quedado por los suelos.
Sin nada que ofrecer a las nuevas generaciones, el CREN recibió el tiro de gracia por las nuevas reglas emanadas de la Reforma Educativa, que abre la puerta a cualquier profesionista titulado para competir por una plaza o por horas-aula, mano a mano con los egresados normalistas.
Con el prestigio manchado y sin la posibilidad de garantizar a sus estudiantes un futuro digno en la carrera magisterial, la Normal perdió todo su atractivo y está en vías de desaparición.
