Chetumal, 25 de septiembre
(Novedades Quintana Roo)
Los taxistas de Quintana Roo insisten en obtener un incremento en la tarifa de transporte, pero ahora pasaron de solicitar 30% de aumento, a 42%, con el argumento de que la inflación disparó el precio de la gasolina y los costos de mantenimiento de los vehículos.
Es el caso de la capital del estado, donde Julio César Castilla Zapata, líder del Sindicato Único de Choferes de Automóviles de Alquiler (SUCHAA), dijo que este aumento también es para cumplir con la exigencia del Instituto de Movilidad de Quintana Roo, para renovar las unidades que se encuentran en mal estado.
“Es precisamente la falta de utilidades lo que ha impedido a algunos concesionarios actualizar los vehículos, por lo que requieren que les aprueben subir los costos del pasaje”, dijo el dirigente.
Destacó que el último ajuste a las tarifas de taxi que les autorizaron fue en el 2019 y llevan 5 años pidiendo que les permitan modificar los tabuladores.
También negó que los taxistas de la capital realicen cobros indebidos, ya que, hasta el momento, el sindicato que representa no ha recibido ninguna queja.
En el mismo sentido se pronunció el dirigente de los taxistas pero de Cancún, Rubén Carrillo, quien destacó que es urgente tocar el tema de los incrementos al pasaje, porque las ganancias de los taxistas han quedado rebasadas en 60% por la inflación.
También puntualizó que en Cancún solo quedan 600 unidades Tsuru que siguen operando, a pesar de que la Ley de Movilidad establece que no pueden brindar el servicio de transporte vehículos que tengan más de 10 años de antigüedad.
“Es un tema difícil, pero poco a poco los hemos ido renovando. Pero tenemos una flotilla de miles de taxis, y no se pueden cumplir las exigencias de la autoridad si no equilibra la balanza siendo justos en el cobro de la tarifa”,
Se pronunció Movilidad
En su momento, Rodrigo Alcázar Urrutia, director del Instituto de Movilidad de Quintana Roo, dio a conocer que la dependencia está realizando un estudio -por única ocasión-, para determinar la factibilidad de nuevas tarifas del transporte público en el estado, debido a que las organizaciones sindicales han solicitado aumentos, pero sin análisis de por medio, como lo establece la Ley de Movilidad vigente.