Tirabuzón
Omar Capistrán
Chetumal, Quintana Roo.- Tiempo de elecciones y prometer no empobrece. Una de las grandes cargas para las administraciones de los tres niveles de gobierno agoniza sin que nadie tome cartas en el asunto.
Se trata del Corredor Escultórico Chactemal, el cual no solo ha sido abandonado a su suerte sino que, cada vez luce menos piezas.
Chapearle los alrededores de vez en cuando y pintarlo sin ningún cuidado ha sido la única iniciativa que ha sido aplicada en los últimos años, sin embargo, se requiere de al menos tres millones de pesos para que vuelva a recuperar el mismo brillo de hace 20 años, este último dato palabras de la ex titular del ICA Jaqueline Estrada.
Esta obra que lucía majestuosa a lo largo de todo el Boulevard Bahía de Chetumal hasta llegar a la localidad de Calderitas y en calles importantes, se creó como resultado del Segundo Encuentro Internacional de Escultura efectuado a finales de 2003.
Durante un recorrido In situ, se apreció que las esculturas no solo se encuentran vandalizadas, faltan, ya que de acuerdo a los datos se trataba de 24 trabajos donados, ¿dónde están?
Entre las esculturas se encuentran el “Nudo Coralino” de Sebastián, a quien los chetumaleños le mientan la madre cada vez que ven la mega escultura, “La Paz” de David Laurence Field, “Caballo Negro” de Joop Beljon y “Personaje” de José Luis Cuevas. La gran mayoría de estos trabajos ya no tiene ni siquiera su placa.
El paseo a través del Corredor era como lo calificaron entendidos del tema, una experiencia estética, pues a las esculturas las acompañaba un paisaje marino encuadrado por el mar.
El Corredor contaba con esculturas realizadas por artistas plásticos de Brasil, Cuba, Colombia, Venezuela, Paraguay, Estados Unidos, Egipto, Japón y México.
Nos encontramos en pleno proceso electoral, ¿quién será el valiente que se aviente el tiro de devolver su brillo no solo a al corredor, sino a otros espacios que se encuentran en franco desuso?
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