Joaquín Quiroz
Aprovechándose de la pandemia de 2020, donde en cada discurso y escenario se quejaba el entonces gobernador quintanarroense Carlos Joaquín González sobre la difícil situación económica que atravesaba el mundo y la entidad.
Su hijo mayor Carlos Nassim Joaquín Rejón se dedicaba a hacer jugosos negocios con sus amigos, algunos de ellos en ese momento gracias a él subalternos de la empleada consentida del chespirato la hoy diputada Verde Ecologista Yohanet Torres Muñoz, y en aquel entonces titular de SEFIPLAN, en medio del caos mundial se constituían empresas para hacer dinero y negocios.
Uno de los actores clave en estos negocios es Carlos Nassim Joaquín Rejón, hijo del ex gobernador, quien se alió con Eduardo José Cisneros Paredes, ex titular del Servicio de Administración Tributaria de Quintana Roo (SATQROO).
Y fue así como fundan una empresa denominada Grupo Parejo del Sureste S.A. de C.V. en septiembre de 2020. Esta empresa cuenta con dos accionistas principales: Carlos Nassim Joaquín Rejón, quien posee el 50% de la empresa , y Eduardo José Cisneros Paredes, también con 50% de la misma, siendo este administrador único.
En un documento notarial formalizado por el notario público Ramón Rolando Heredia Ruiz, fedatario público número 83 de Playa del Carmen, en el instrumento número 3673, se hizo esta sociedad entre el entonces funcionario público y el hijo de Carlos Joaquin, creando esta empresa con la aportación cada uno de 50 mil pesos, como capital social mínimo.
Cisneros Paredes experimentó un rápido ascenso dentro del SATQROO, un organismo creado por Carlos Joaquín para administrar los considerables ingresos anuales del Estado, que ascienden a aproximadamente 7 mil millones de pesos.
Eduardo José Cisneros Paredes, luego de haber sido subdirector en el ayuntamiento de Solidaridad, se unió a la administración estatal como Recaudador de Rentas en el municipio de Tulum en 2018. En 2020, se convirtió en socio de Carlos Nassim Joaquín Rejón.
Dos años después, ascendió al puesto de director general del SATQROO y posteriormente se desempeñó como director estatal de Auditoría Fiscal. La supervisión de la empresa conformada por Cisneros Paredes y el hijo de Carlos Joaquín recayó en Fernando Morales Mendoza, quien también fue funcionario en Tulum.
Esta empresa, tiene múltiples giros, desde la administración de restaurantes, inmobiliaria, difusora de publicidad y cuanto negocio, se pueda hacer, e incluso para expandir este lucrativo negocio del chespirato, crearon a raiz de esta empresa, más sociedades como Rentas y Restaurantes Místicos, tambien notariada por Ramón Rolando Heredia Ruiz, fedatario público número 83 de Playa del Carmen en el instrumento 4451, para hacer el negocio en grande.
Actualmente no hay muncipio del norte de Quintana Roo que no tenga algún negocio que dependa de estos exitosos empresarios, y por supuesto los permisos y licencias de alcoholes sin problema alguno se daban para el lucrativo negocio del junior y sus amigos, además de todo lo que se ocupara en sitios como Tulum en ese entonces gobernado por otro integrante del Chespirato Víctor Mas Tah para que los jóvenes emprendedores hicieran sus negocitos, con usos de suelo y demás a su servicio.
Si bien sabido es que la hoy diputada Yohanet Torres Muñoz seguia órdenes del pequeño Carlos Joaquín y despachaban juntos en diversas casas y dependencias, y el expedir licencias de alcohol y demás no era problema alguno, todo quedaba en familia.
Diversos socios y sociedades hizo el hijo de Carlos Joaquín quien hoy según nos refieren quiere incidir en los designios del Partido Verde Ecologista en Playa del Carmen, y si bien es cierto gracias a la 4T tiene Carlos Joaquín González el manto protector como embajador de México en Canadá no así su hijo.
Quien es un próspero empresario gracias a su señor padre, quien mientras goza en Otawa, su vástago administra el oneroso patrimonio hecho gracias a las y los quintanarroenses, a esos que tanto quedó a deberles el exmandatario.
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