Chetumal, 16 de junio
(cambio22)
Este viernes se dio a conocer la información extraoficial de que Óscar Montes de Oca Rosales presentó su renuncia al cargo, por petición de la titular del Ejecutivo, Mara Lezama Espinosa, realizada a través de la Secretaría de Gobierno.
Fuentes del Congreso del Estado confirmaron que la secretaria de Gobierno, Cristina Torres Gómez, fue la encargada de pedir a Montes de Oca Rosales su renuncia como fiscal y la de su círculo cercano de trabajo, ayer por la noche.
La salida de Montes de Oca Rosales se daría en medio de una crítica elevación de los hechos de violencia, en la que los homicidios dolosos se han elevado en todo el estado, marcadamente en las otrora tranquilas zona sur y zona maya.
Lo cierto es que, conforme a la Constitución del Estado, la única autoridad facultada para destituir a fiscal es la titular del Poder Ejecutivo, pero hasta a la fecha no lo ha hecho a pesar de las evidentes deficiencias de su gestión, mismas que hicieron que no se le diera aumento presupuestal al organismo en el 2023.
Sin embargo, la versión de que a Montes de Oca se le pidió la renuncia, significaría que se ha considerado que ya suficiente el tiempo que se le concedió para demostrar que podría dar resultados, por lo que la paciencia con él se acabó.
Montes de Oca Rosales ha sido fiscal general en Quintana Roo 4 años y medio, la mayoría durante el tiempo del gobernador que lo propuso para el cargo, Carlos Joaquín González, y los últimos 9 meses en el gobierno de la morenista Mara Lezama.
Al mismo tiempo que se dio a conocer la versión de la renuncia de Montes de Oca, se hizo circular en el espacio público el nombre de Raciel López Salazar, delegado en Quintana Roo de la Fiscalía General de la Republica (FGR), como el principal candidato a sucederlo.
De la gestión del todavía funcionario federal ante la FGR en Quintana Roo no se conocen resultados destacables que apuntalen el combate al crimen organizado, que es su principal función, y viene con el antecedente de haber sido destituido como secretario de Seguridad Pública de Puebla por el gobernador Miguel Barbosa Huerta, señalado de abusos y excesos cometidos por personal a su mando.
Otro nombre que ha sido promovidos para el puesto son el del exsecretario general del Ayuntamiento de Benito Juárez, Jorge Aguilar Osorio.
