Necesariamente Incomoda
Graciela Machuca Martínez
El pueblo de Quintana Roo espera que cada uno de los tres poderes del estado cumplan con su función para lograr el anhelado equilibrio constitucional, sin embargo, se ha demostrado que tanto el Poder Judicial y el Legislativo, solo están al servicio de los grupos de poder político y económico de la entidad, olvidándose en todo momento de los requerimientos de las mayorías.
Quienes integran la XVII Legislatura, durante el año electoral 2021 recorrieron el estado y gritaron a los cuatro vientos que había llegado el momento de trabajar por Quintana Roo y a ello se comprometieron, el electorado les creyó, les dio su voto, pero durante los dos últimos dos años y siete meses, han demostrado lo contrario, responden solo a los intereses de sus padrinos políticos y económicos y prueba de ello son las leyes y reformas legislativas que afectan la economía y los derechos humanos de la sociedad quintanarroense.
El congreso de Quintana Roo se ha convertido en un poder al servicio de unos cuantos, a tal grado que la XVII Legislatura no tiene una agenda legislativa para irla sacando conforme avanzan los periodos ordinarios, sino que navegan a donde los lleva el viento político y las instrucciones de quienes realmente deciden que se legisla y qué no.
Pero quienes han dirigido y dirigen el Congreso han encontrado en este poder una minita de oro, debido a que exprimen al máximo el presupuesto para beneficiarse y beneficiar a sus allegados, como lo ha demostrado el periódico CAMBIO 22 al dar a conocer los negocios multimillonarios que se han venido haciendo desde la oficina de Comunicación Social y Difusión del Congreso de Quintana Roo.
Los responsables de estos atropellos al presupuesto público han sido los presidentes de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (Jugocopo) Renán Sánchez Tajonar y Luis Humberto Aldana Navarro.
El manejo discrecional de los recursos públicos se ha realizado, como lo sustenta CAMBIO 22, para cumplir compromisos con periódicos oficialistas y vinculados a grupos políticos y económicos del estado, así como negocios relacionados con gobiernos del PVEM y Morena, encubriéndolos con dobles contratos a nombre de empresas fachada y hasta fantasma y con la consignación de servicios inexistentes o injustificables.
Durante el 2023 el diputado del PVEM Sánchez Tajonar triplicó el presupuesto para difusión y publicidad del Congreso local, pues lo elevó de 4 millones 867 mil pesos, que se autorizaron originalmente, a un 𝐠𝐚𝐬𝐭𝐨 𝐟𝐢𝐧𝐚𝐥 𝐝𝐞 𝟏𝟑 𝐦𝐢𝐥𝐥𝐨𝐧𝐞𝐬 𝟐𝟎𝟎 𝐦𝐢𝐥 𝐩𝐞𝐬𝐨𝐬, a pesar del anuncio de medidas de “austeridad” en ese año; mientras que el diputado de Morena Aldana Navarro, su sucesor en la presidencia de la Jugocopo, avaló dicho incremento y luego promovió la aprobación de un presupuesto semejante para el 2024, por 12 millones 22 mil pesos, que todo indica que será ampliado a lo largo del año para cumplir con sus turbios compromisos, según la pieza periodística del Diario CAMBIO 22.
Renán Sánchez y Humberto Aldana Financian a Cofradía de Cuatro Medios Oficialistas con Presupuesto de Difusión del Congreso de Quintana Roo
El diputado local Humberto Aldana, ya logró su objetivo político para ser candidato a diputado federal y Sánchez Tajonar está en espera de ser nombrado candidato a presidente municipal en Cozumel, pero si no logra esta meta se conforma con ganar la reelección como diputado local.
Los negocios de ambos legisladores están expuestos de manera contundente, porque el 83 % del presupuesto de difusión y publicidad del Congreso del Estado fue pagado a sólo cuatro periódicos oficialistas, lo que representó que entre ellos se repartieron 11 millones 200 mil pesos en el 2023 procedentes de recursos del Poder Legislativo.
De acuerdo a información obtenida por medio de la página de Transparencia del Congreso, el periódico que se llevó el presupuesto más alto fue el Diario de Quintana Roo, al que pagaron el 30 % del presupuesto de difusión del Congreso del Estado, un total de 4 millones 200 mil pesos; y de hecho, sólo en los tratos con este periódico asentado en Chetumal se estaban gastando casi todo el presupuesto que originalmente habían autorizado para el 2023.
Pero como el presupuesto original no les alcanzó para repartírselo, tuvieron que ampliar el presupuesto para que Quintana Roo Hoy y Novedades de Quintana Roo, recibieran, cada uno, el 20 % del presupuesto final de publicidad del Congreso, a razón de 2 millones 640 mil pesos por medio de comunicación; mientras que al Quequi le tocó el 13 % del presupuesto total de difusión del Poder Legislativo, un total de un millón 720 mil pesos; montos que en total representan otros 4 mil 360 millones de pesos de ampliación sobre la partida original.
Mientras los recursos públicos son utilizados para limpiar la imagen de Aldana Navarro y Sánchez Tajonar, la XVII legislatura es incapaz de exhortar a la presidenta municipal de Solidaridad, Lili Campos, que cese sus intimidaciones de acoso judicial contra quienes difunden desde los medios de comunicación el caos y la anarquía en que ha dejado el municipio, desde luego que al Congreso no le compete legislar en materia de Libertad de Expresión, pero si está obligado a llamarle la atención a las personas servidoras públicas que quieren actuar por encima de la ley.
