Chetumal, 18 de abril
(Herlindo Vázquez/FB)
El enfermero Ramiro Cáceres López fue asesinado violentamente en las inmediaciones de la comunidad de Nicolás Bravo.
La Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó el hallazgo del cuerpo con heridas de bala.
Asimismo, el aseguramiento del presunto responsable.
El 13 de abril pasado, Ramiro Cáceres López desapareció en la carretera Nicolás Bravo-Caobas, cuando se dirigía a su pueblo.
Su vehículo fue incendiado y resultó pérdida total.
Su teléfono móvil fue detectado en Subteniente López.
Además, familiares y amigos aportaron elementos para la investigación.
Pero como el martes agentes de la Policía Ministerial adujeron carecer de combustible y vehículos para movilizarse y quedar impedidos para la búsqueda, familiares y amigos realizaron protestas sociales.
En la tarde en la Vicefiscalía de Justicia Distrito Sur y en la noche bloquearon la Avenida de Los Insurgentes, frente a la Clínica del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Al día siguiente un continente de aproximadamente 90 elementos de diversas corporaciones iniciaron operativos de búsqueda.
Al no haber resultados favorables, los inconformes dieron plazo hasta la tarde de hoy, de lo contrario, bloquearían la carretera Chetumal-Escárcega.
La Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó el hallazgo del cadáver.
Estaba en la selva aledaña a Nicolás Bravo y tenía huellas de violencia y heridas de bala.
Fue levantado por el Servicio Médico Forense (Semefo), para el procedimiento de rigor.
De igual modo, se confirmó la detención del presunto responsable, identificado como «Clemente».
Así se desactivan las manifestaciones extremas anunciadas para este viernes en Nicolás Bravo y entrada de Chetumal.
Los familiares se mantienen afuera del Laboratorio Forense en espera de resultados.
También exigen continúe la investigación, pues no se quiere «un chivo expiatorio», y se proceda conforme a la Ley.
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