Chetumal, 4 de agosto
Juan Juárez Mauss
Noventa niños en todo Quintana Roo han sido detectados por las autoridades siendo utilizados para realizar comercio informal en avenidas y calles, fenómeno que ha crecido durante los periodos de vacaciones, como este verano 2015.
La situación se ha vuelto complicada para las autoridades del sistema DIF estatal, pues a pesar que en muchos de estos casos se apoya a los menores con alguna beca económica para evitar que los padres envíen a sus hijos a la calle, estos siguen mandando a sus vástagos a comerciar productos como flores o dulces.
Jesús Rodríguez Herrera, Director General del sistema DIF, reconoció que al igual este fenómeno se presenta con personas de la tercera edad, los cuales son utilizados por sus familiares como vínculo para hacerse de dinero.
Reconoció que el riesgo es grande para los menores y ancianos ya que en muchas ocasiones trabajan a altas horas de la noche y en sitios peligrosos, como a las afueras de bares y “tables dance”.
El fenómeno de la explotación infantil en Quintana Roo es difícil de abatir, pues no solo en las zonas turísticas los infantes son obligados a trabajar, también en áreas agrícolas como la zona cañera del sur del estado. El DIF municipal de Othón P. Blanco detecta cada ciclo de zafra a por lo menos 100 infantes trabajando en el corte de la vara dulce.
Incluso se sabe que el organismo estatal está tras las huellas de una banda de explotadores provenientes de los estados de Chiapas y Oaxaca, los cuales traen a menores a vender artesanías en los puntos turísticos importantes del estado.