Chetumal, 15 de junio.-
Después del millonario golpe al contrabando dado por la Secretaría de Marina – Armada de México en el sur del Estado, al decomisar 22 millones 200 mil cigarrillos de procedencia asiática, la aduana de Subteniente López reforzó la revisión a vehículos y pasajeros que ingresan al país, como un intento desesperado de simular el combate al contrabando de fayuca y mercancía ilegal que es introducida a México a través de este recinto federal, lo cual muchas veces se logra debido a la colusión que existe entre aduaneros y fayuqueros.
Como parte de las nuevas medidas implementadas en la revisión a vehículos que se hace en la aduana del puente Chactemal, además de revisar el interior y cajuela del automóvil, también se está inspeccionando el frente, en la parte donde va el motor.
Con respecto a aquellos turistas que cruzan a pie por la aduana del puente Subteniente López, las revisiones se volvieron más estrictas bajo el argumento de que los aduaneros se tienen que cerciorar de que nadie esté introduciendo mercancía ilegal, como cigarros y alcohol.
Incluso, Por Esto! de Quintana Roo ha recabado diversas quejas de turistas de sexo femenino a las que les han revisado sus bolsos de mano e incluso registran a las personas en busca de presuntos objetos ocultos en sus vestimentas, ya sea yendo a pie o en vehículo.
Al supuestamente “reforzar” las medidas de seguridad y vigilancia en el mencionado recinto federal, los aduaneros ocasionan una mayor demora en el tiempo de las revisiones, por lo que durante el pasado fin de semana se observaron ligeros embotellamientos vehiculares de aquellos pasajeros que esperaban ingresar a México por la aduana Chactemal.
De manera extraoficial se supo que estas medidas son un intento desesperado por simular el combate al contrabando de fayuca y mercancía ilegal que se hace en esta área aduanal, delito que se favorece con la colusión que existe entre aduaneros y contrabandistas.
Se sabe que existen agentes de aduana que a cambio de cierta suma de dinero permiten pasar a los fayuqueros mercancía de todo tipo, incluyendo cigarros y alcohol, que son artículos prohibidos para ingresar a México.
Incluso existen ciertos horarios especiales en los que los inspectores del Servicio de Administración Tributaria (SAT) se “hacen de la vista gorda” y permiten cruzar motos, combis y camionetas cargadas de fayuca y mercancía ilegal, cobrando por ello cantidades cercanas a los 5 mil pesos por unidad.
Reflejo de que la aduana de Subteniente López no evita el tráfico de mercancía prohibida o controlada es el importante golpe al contrabando que la Secretaría de Marina – Armada de México asestó en el sur de Quintana Roo al decomisar una cantidad “monstruosa” de cigarrillos de origen asiático, que se tenían resguardados en un predio a la salida de la comunidad de HuayPix, en el municipio de Othón P. Blanco.
Si bien mucho del material incautado fue introducido al país a través de los cruces ilegales, se sabe que parte de éste también fue pasado por la aduana de Subteniente López empleando diferentes estrategias que diariamente se usan para meter este tipo de mercancía a México.
Por eso es que entre los mayores “logros” de la autoridad aduanera en el sur de Quintana Roo sólo está el decomiso continuo de mercancía, alcohol y cigarros que de manera abusiva les quitan a los turistas, que por desconocimiento o a sabiendas de ello se arriesgan a pasar los productos prohibidos para consumo personal.
Sin embargo, mientras los aduaneros se mantienen al acecho del turismo, no se ha sabido que hayan dado un gran golpe al contrabando mayor como el asestado recientemente por la Armada de México, y no será así mientras sigan perjudicando a los pasajeros pero favoreciendo a los grandes fayuqueros.
Gabriel E. Manzanilla (POR ESTO! DE QUINTANA ROO)