Cancún, 3 de enero
(laopinionqr)
La presidenta municipal de Solidaridad, Lili Campos, analiza la posibilidad de ir a la reelección siglada por el PRI y no por el PAN.
La situación causa sorpresa, porque la alcaldesa se había mantenido muy cercana al PAN durante toda su gestión. Sin embargo, diferencias sobre el armado de la planilla que la acompañará a la elección han cambiado la situación.
Hay dos versiones sobre este punto.
Una de esas versiones dice que Lili quiere una planilla propia en la cual el PAN y PRD casi no tienen lugar. La mayoría de los espacios es gente propia de la alcaldesa, muchos vinculados al PRI por Filiberto Martínez, uno de sus principales operadores.
La otra versión dice que el fondo del asunto es que la dirigencia panista quintanarroense le pidió “cosas imposibles” a Lili en el armado de su planilla y la campaña.
En el entorno de Lili creen que eso no es gratuito; es parte del trabajo que hace la dirigente panista Reyna Tamayo para jugar políticamente a favor del marismo y MORENA.
Más allá de eso, existe la idea en el Frente de que finalmente la dirigencia nacional del PAN meterá las manos en la negociación y no dejará ir a Lili Campos a otro partido.
La alcaldesa de Solidaridad es la única carta fuerte del albiazul para anotarse algún triunfo en el estado. Y aun así no es nada fácil ganarle a MORENA en Solidaridad.
Para el PRI la opción de Lili Campos con sus colores es pura ganancia. El partido está en su peor momento histórico y cualquier indicio de recuperación es bienvenido.
Otra opción es que Lili sea siglada por el PRI quizá en un formato de candidatura común, en donde más bien se escondan los colores y se apunte sólo a la figura de la alcaldesa, que está bien posicionada.