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Lili Campos evitó la ‘acapulquización’ de Playa del Carmen

Ajuste de Cuentos
Ángel Solís

En tiempo record, la presidenta municipal de Solidaridad (Playa del Carmen), Lili Campos Miranda, rescató a este destino turístico de la Riviera Maya del abismo donde lo hundió la alcaldesa morenista Laura Beristain Navarrete en materia de inseguridad, al sacarlo de la lista negra de las 50 ciudades más violentas del país, donde llegó a ocupar el lugar número 17, esto pese a que el gobierno federal dejó de asignarle recursos al Programa de Fortalecimiento para la Seguridad (Fortaseg), vital para los municipios del país.

Con una inversión sin precedente de más de mil 200 millones de pesos, el gobierno de la panista Lili Campos destinó recursos propios para la adquisición de patrullas –ya que tan solo se recibieron 20 unidades motorizadas y patrullas–, equipamiento y sobre todo incrementos e incentivos salariales a los elementos de la corporación policiaca a su cargo.

Tal como ocurre en el desangrado Acapulco donde gobierna otra morenista, en sus tres años de administración de pesadilla Laura Beristain entregó a Playa del Carmen con 412 ejecuciones, cientos de “desaparecidos” y una ciudad turística controlada en su totalidad por la delincuencia organizada, cuyos maleantes diversificaron sus “actividades”, pasando de la simple venta de drogas a la extorsión, préstamos gota a gota, los secuestros express y el temido cobro por derecho de piso, entre muchos delitos más.

Con este negro panorama, Lili Campos impulsó diversas líneas de acción´, como el duplicar el número de cámaras de vigilancia conectadas al Centro de Control e Inteligencia (C2) municipal y al C5 estatal, la adquisición de más de 300 patrullas, así como la construcción de filtros policiacos para blindar las entradas y salidas de Playa del Carmen, equipadas con reconocimiento facial y de placas, entre otras acciones que ayudan a combatir la inseguridad.

De fines de 2021 –cuando recibió la administración– y a la fecha, los delitos de alto impacto van a la baja de manera muy considerable en Playa del Carmen, ya que  tan solo en delitos como el homicidio doloso (ejecuciones) el gobierno morenista reportaba entre 15 y 18 asesinatos de manera mensual.

Este cambio significativo en materia de seguridad los solidarenses lo reconocen con el pago de sus impuestos, ya que la recaudación ha aumentado mil 700 millones de pesos en el gobierno de Lili Campos respecto a la administración pasada, sin que se tenga que recurrir a la cacería de contribuyentes y muchos menos se aumenten o generen nuevos impuestos para los más de 300 mil habitantes que tiene este municipio.

Actualmente Playa del Carmen impulsó el uso de tecnologías e inteligencia policial, ya que cuenta con 360 cámaras instaladas en la zona turística y puntos estratégicos en la ciudad para mantener vigilancia las 24 horas del día.

La confianza en el gobierno de Lili Campos está a la vista de todos y la mano dura que ha afianzado en materia de seguridad sin duda será uno de los ejes con los que arrancará fuertemente su campaña para la reelección. Y por cierto, Solidaridad es el único municipio donde está al frente de la seguridad pública un policía de carrera, no un militar.

La 4T debe de estar agradecida con Lili Campos porque evitó que un destino turístico de talla mundial, como lo es Playa del Carmen, fuera gangrenado por completo si hubiera gobernado otros tres años la morenista Laura Beristain, a quien la 4T quiere de lejitos, fuera del templete de los elegidos, como se comprobó en la reciente visita de la candidata presidencial Claudia Sheinbaum.

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