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Secuestrada la Biblioteca Central de Quintana Roo: sin proyecto, actividades y cero promoción 

Tirabuzón 

Omar Capistrán 

En junio del 2021 y después de más de 5 años en que Quintana Roo no contó con una biblioteca central, el entonces mandatario estatal, Carlos Joaquin González junto con la ex directora del Instituto de la Cultura y las Artes, Jaqueline Estrada Peña hacían entrega de un recinto digno y equipado para las necesidades bibliotecarias de la entidad. 

Por año y medio, el lugar se convirtió no solo en un lugar de consulta, se proyectó como uno de los más destacados centros culturales del sureste mexicano.

El lugar albergó desde charlas con investigadores hasta conciertos didácticos de la Banda del Gobierno del Estado. Ni que decir de las múltiples actividades dirigidas al fomento de la lectura en los niños. 

A mediados de 2022 llegó el cambio de gobierno y las cosas lucían de maravilla con la primera Gobernadora del Estado, Mara Lezama Espinosa quien incluso encabezó el 13 de enero del 2023 el evento “Memoria Sonora de Quintana Roo” en el recinto.

A la par de la mandataria, las riendas del ICA fueran designadas a la entonces priísta Lilian Villanueva Chan, quien ya había estado al frente de cultura durante la gestión de Roberto Borge Angulo, actualmente tras las rejas.

El que escribe, quien llevaba las riendas del lugar hasta hace unos días, entregó en septiembre del 2022 un resumen de las actividades realizadas en el sitio desde su inauguración, un resumen del estado de las bibliotecas que pertenecen al ICA así como un plan de actividades que incluían en el mes de octubre de ese mismo año entregar simbólicamente la sala infantil al maestro Javier España Novelo y la ludoteca al maestro Ramón Iván Suárez Caamal, esta actividad había sido aprobada por Jaqueline Estrada y únicamente había que darle continuidad ya que incluso, el maestro España tenía confirmado el viaje de parte de su familia para estar n ese merecido homenaje. 

Tristemente y debido a que la biblioteca “no se manda sola” el evento fue cancelado por Villanueva Chan. Es necesario resaltar que siempre, el encargado del departamento de bibliotecas y fomento literario se hacía cargo de la biblioteca central, departamento que por alguna razón depende de la Dirección  de Patrimonio Cultural. No obstante, la biblioteca mantenía completa autonomía en torno a sus eventos y actividades.

Tan pronto se renovó la dirección del ICA, la Biblioteca Central paso de ser un centro de consulta a oficinas gubernamentales. Primero, llegó la Dirección de Patrimonio Cultural a cargo de Gustavo Argueta, quien  dejaría en ese puesto a   Felipe Ley López, contador de carrera y quien desconoce por completo el tema cultural en la entidad. Este puesto fue ocupado anteriormente por Oscar Marrufo quien en todo momento demostró conocimiento y e interés por el patrimonio de Quintana Roo y pese a eso  fue perseguido por la actual dirección. Actualmente se encuentra relegado a una jefatura, desperdiciado por completo al igual que varios servidores proveniente de la pasada administración.

Ley López, pese a tener a un ejército de trabajadores, continúa sin dar resultados en el sentido del rescate del patrimonio, pero si se ha encargado de permitir el desmantelamiento de la biblioteca central así como la pérdida de su autonomía.

Así, la Biblioteca Publica Central Javier Rojo Gómez hoy alberga la dirección General del ICA para lo cual Villanueva Chan dispuso de la oficina central del ICA más dos oficinas más pequeñas adjuntas para sus asistentes y personal de confianza y tres secretarías más. En la biblioteca pública también puede encontrar el departamento  de difusión  y  comunicación social , el departamento de difusión y comunicación digital, la dirección de patrimonio cultural para la cual aparte se dispusieron dos módulos de la biblioteca para secretarias de Ley López.

También, aquí puede hallar el departamento de gestión de proyectos, el departamento de patrimonio material e inmaterial, el departamento de bibliotecas y fomento literario y la coordinación de bibliotecas y fomento a la lectura, un puesto jurídicamente inexistente y que por lo tanto no figura en ningún organigrama. Este puesto le fue otorgado a Rodolfo Ovando l, personaje al igual que Ley López, caracterizado por su despotismo, mal trato y acoso laboral y usurpación de funciones. 

Y es precisamente este último  personaje que tendrá que brindar en breve  explicaciones en torno a faltas muy serias cometidas que reflejan no solo el dolo con que se ha conducido sino una enorme ignorancia en torno al manejo de información  y usurpación de puestos y nombres.

Y es que desde julio de 2023  Novelo Ovando a enviado a la federación las estadísticas de la biblioteca Javier Rojo Gómez  a nombre de Omar a Capistrán,esto a pesar de que su puesto fue inventado en el  mes de noviembre. Es precisamente en este mes en que se atrevió incluso a  quitar el nombre de Omar Capistrán  y poner el suyo. Posteriormente volvió a cambiar de parecer y volvió a colocar en los documentos el nombre de Omar Capistrán, un tema por el tendrá que responder legalmente en breve. 

Así entre Ley López y Novelo Ovando, la biblioteca hoy se encuentra en franca decadencia, sin computadoras, sin el complejo del Gran  Acuífero Maya que fue desmantelado, con un auditorio utilizado como bodega, sin ninguna programación dirigida a los niños, lo único que se programa son los círculos de lectura de “Ovando y su club, sin ningún proyecto dirigido a abrir el espacio al arte y la cultura, sin personal que atienda la ludoteca, la ex encargada se encuentra el servicio exclusivo de Felipe Ley, sin personal que se dedique de lleno a cuestiones administrativas como la realización de estadísticas y lo más preocupante, cada vez es peor el maltrato y acoso laboral hacia los bibliotecarios, el último ejemplo, el de una recepcionista que por una semana fue mantenida laborando con dolor y visiblemente enferma. Tuvo que solicitar vacaciones extraordinarias para atenderse  resultando tener un tumor. 

Cartas en el asunto deben tomar al respecto los órganos de control interno del gobierno del estado, la propia gobernadora Mara Lezama e incluso a la  Dirección General de Bibliotecas a la cual por cierto, le deben la explicación de porque se permitió que una biblioteca entera de Cozumel se embodegara y echara a perder durante la primera gestión de Lilian Villanueva porque Ley López ha permitido el establecimiento de múltiples oficinas y la extracción enorme de artículos destinados al lugar como mesas, computadoras y anaqueles. Sobra decir que todos los espacios estaban destinados q diversos proyectos de la biblioteca. Como ejemplo le pongo el propio, a quien le quitaron su oficina tres veces, terminando finalmente en un rincón del recinto. Pero eso si, el lugar fue utilizado el viernes pasado como salón de fiestas, el cumpleañero, el propio Ley López.

Y tan solo estamos comenzando. En la próxima entrega le voy a platicar como se manejan los recursos que entran al Museo de la Cultura Maya y sobre todo el del Fuerte San Felipe  de Bacalar. No lo va a creer.

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